Educación

Familias impiden que una comunidad wichí tome una escuela: "Queremos tener clases"

Los padres de los alumnos de la Escuela Rural N° 5199 de La Mora, Tartagal, están molestos por la medida que tomó una familia originaria. Afirman que la protesta tiene fines personales, ya que el caci

En las últimas horas, un conflicto en la Escuela Rural N° 5199 de La Mora, en la ciudad de Tartagal, ha generado preocupación y rechazo entre los padres de los alumnos. Un grupo de manifestantes acusó a una familia perteneciente a una comunidad originaria de impedir el dictado de clases, alegando que buscan que sus hijas sean contratadas como empleadas del establecimiento.

La situación escaló el pasado viernes cuando Marcela Calermo, una histórica dirigente indígena del norte provincial, junto a sus hijas, tomó las instalaciones de la escuela. Según relató una mujer afectada al colega Luis Mena, la medida ha generado un "calvario" para la comunidad educativa. "A partir del viernes, tomaron la escuela. Marcela Calermo junto a sus hijas. El pozo ciego está empeorándose, pero ella quiere hacer entrar a sus dos hijas que terminaron el secundario", explicó.

Los padres denuncian que las hijas de Calermo no estarían aptas para ocupar cargos en la escuela debido a su comportamiento. "Las hijas de ella no están aptas para ese cargo porque son muy agresivas. Ayer, cuando llegamos, empezaron a burlarse de nosotros", agregó la mujer. Además, señaló que Calermo alega tener el respaldo de su tío, aunque hasta el momento no ha habido enfrentamientos físicos.

La comunidad escolar también cuestiona las intenciones detrás de la toma. "Ellos están hace mucho acá. Tenían que haber tomado una decisión de 'qué hacer si la escuela se cae a pedazos', pero no para hacer ingresar a sus hijas. No es que tiene que pechar para ello", expresó uno de los padres.

Otro punto de conflicto es el requisito de dominio bilingüe para trabajar en la institución. "Tienen que tener el 100% de la lengua bilingüe, pero no sé si ellas saben", comentó uno de los manifestantes. Los padres aseguran que su principal preocupación es garantizar el acceso a la educación de los niños. "Nosotros tomamos la iniciativa de no permitir que se bloquee el acceso a los chicos a la escuela. Estamos cansados de que la mujer Marcela Calermo quiera tomar decisiones que afectan a todos", afirmaron.

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