Investigan nuevos datos del asesinato a dos bolivianos en ruta 34: tres detenidos
Una persona es de Orán y las otras de Tucumán. Los cuerpos tenían orificios de balas y estaban maniatados.
Los exámenes forenses han revelado que los dos cuerpos encontrados el pasado mes de mayo a la vera de la ruta nacional 34 presentaban signos de extrema violencia previa a la muerte, además de múltiples lesiones causadas por disparos de arma de fuego. Las víctimas, dos hombres de nacionalidad boliviana, fueron halladas en Colonia Santa Rosa, en lo que se sospecha fue un crimen perpetrado por una peligrosa organización criminal.
En las últimas horas, la Unidad Fiscal de Litigio Estratégico contra el Crimen Organizado del Norte, integrada por las fiscales Claudia Carreras, Soledad Filtrin Cuezzo, Pablo Cabot, y María Luján Sodero, asumió la conducción de la investigación del doble homicidio. Esta decisión fue tomada ante la creciente evidencia que vincula el hecho a actividades delictivas organizadas de gran peligrosidad en la región.
El avance del caso, liderado inicialmente por la fiscal Penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Orán, María Soledad Filtrín Cuezzo, y el Grupo Investigativo GAP de Orán, permitió la detención de una persona oriunda de Orán y de dos individuos provenientes de la provincia de Tucumán. Estos arrestos fueron posibles gracias a la implementación de técnicas avanzadas de investigación, las cuales proporcionaron indicios claves sobre el paradero de los sospechosos. Los detenidos fueron trasladados desde Tucumán a Salta para enfrentar la justicia.
En el transcurso de las pesquisas, se descubrió que varios vehículos participaron en la logística delictual, entre ellos, un automóvil abandonado en la vía pública en la localidad de Libertador General San Martín, en cuyo interior se encontró documentación que lo vinculaba a una estadía en la Ciudad de Orán. El análisis de información tecnológica también demostró la compatibilidad del recorrido de los vehículos con la zona cercana al lugar donde se hallaron los cuerpos.
El juez del Tribunal de Impugnación, Juan Marcos Ezequiel Molinati, rechazó los recursos de apelación presentados por las defensas de los imputados y confirmó la prisión preventiva dictada por el Juez Francisco Oyarzú a solicitud de la Fiscalía de Orán. Esta medida resalta la gravedad de los crímenes y la firmeza del sistema judicial en el tratamiento de casos vinculados a la criminalidad organizada.
Relato del trágico suceso
El 10 de mayo de este año, en una desolada zona a la vera de la ruta nacional Nº 34, en Colonia Santa Rosa, se descubrieron los cuerpos sin vida de dos hombres de origen boliviano. La escena del crimen presentaba un cuadro desolador: ambos cuerpos mostraban claras señales de haber sido sometidos a extrema violencia antes de ser asesinados. La autopsia reveló que las víctimas habían recibido múltiples disparos de arma de fuego, y uno de los hombres fue hallado maniatado con precintos, similares a los encontrados en uno de los vehículos usados por los sospechosos.
El hallazgo inicial generó un gran operativo policial, que incluyó la intervención del Grupo Investigativo GAP de Orán. La investigación rápidamente avanzó, apuntando hacia una peligrosa organización criminal como la responsable de los homicidios. Los detectives identificaron y detuvieron a tres sospechosos, quienes presuntamente estuvieron involucrados en la planificación y ejecución de los asesinatos.
Durante la investigación, se descubrió que los autores del crimen utilizaron varios vehículos para movilizarse y perpetrar el delito. Uno de estos vehículos fue hallado abandonado en Libertador General San Martín, con documentación que lo vinculaba directamente con la escena del crimen en Orán. El análisis de los datos tecnológicos disponibles permitió rastrear los movimientos de los sospechosos, confirmando su proximidad al lugar donde se encontraron los cuerpos.
Este trágico suceso, que ha conmocionado a la comunidad, subraya la brutalidad de las operaciones criminales en la región y ha llevado a una intensificación de los esfuerzos por parte de las autoridades para desarticular a las organizaciones delictivas responsables.