En un país donde la longevidad es un desafío creciente, un reciente informe del Registro Nacional de las Personas (Renaper) revela que Argentina alberga actualmente a 8125 personas que alcanzaron los 100 años o más. Este grupo, emblemático de una generación que atravesó buena parte de la historia moderna del país, está conformado mayoritariamente por mujeres.

Según el relevamiento, realizado hasta julio pasado, del total de centenarios, 6130 son mujeres, representando más del 75% de esta franja etaria. Por su parte, los hombres centenarios suman 1995, mostrando una significativa diferencia en términos de longevidad entre ambos géneros.

Este fenómeno de envejecimiento poblacional no solo plantea interrogantes sobre la calidad de vida y el acceso a la salud, sino también sobre el papel que estas personas juegan en la sociedad. Los centenarios, en su mayoría, vivieron en un mundo muy diferente al actual, y sus experiencias y vivencias son un testimonio invaluable de la historia nacional.

El crecimiento de esta población no es un hecho aislado. A nivel global, la longevidad está en aumento, y las proyecciones indican que para 2050 el número de centenarios se incrementará de manera significativa. En este contexto, Argentina se suma a la tendencia, con un número creciente de personas que superan el umbral de los 100 años, destacándose en América Latina.