La diputada nacional por Salta, María Emilia Orozco, se expresó sobre la reciente controversia generada por su visita a la cárcel de Ezeiza, en la que se encontraron con varios represores condenados por delitos de lesa humanidad. En una entrevista con Delta FM (90.3) de Buenos Aires, Orozco explicó que la visita fue realizada para evaluar las condiciones de detención y desmintió que haya tenido un carácter distinto.

"Estamos tranquilos de que no hicimos nada malo", afirmó la diputada, y agregó: "Me sorprende que algunos digan que no conocían cuál era el motivo de la visita". Orozco detalló que la invitación que recibieron decía claramente: "Vamos a ver las condiciones de detención".

La visita ha sido criticada por algunos sectores debido a la presencia de condenados como Alfredo Astiz y Raúl Guglielminetti, entre otros. Orozco, sin embargo, aclaró que su intención no era exclusivamente encontrarse con estas personas, sino también revisar aspectos generales de las condiciones carcelarias.

La diputada vinculó su acción a los lineamientos de su "línea política", citando a Victoria Villarruel, quien ha defendido a aquellos privados de libertad por causas controvertidas. Orozco subrayó: "Hay muchas cosas que no se cuentan de esa parte de la historia, sin negar y desmerecer todo lo que sucedió y que esperamos que no ocurra nunca más".

Además, intentó desviar la atención hacia otros temas, como las condiciones laborales de los agentes penitenciarios y el hacinamiento en las unidades carcelarias. También se dirigió a la oposición, afirmando que cualquier mínimo error será usado en su contra para atacar a su bloque político.

Finalmente, la diputada reconoció que la polémica ha sido aprovechada para desprestigiar a su grupo, diciendo: "Entiendo que hay un sector que nos quiere defenestrar y cualquier mínimo error o traspié va a ser convertido en artillería para seguir golpeándonos".